Ha sido un verano entretenido, interesante e intenso, sobre todo intenso. Ha tenido de todo: buenos findes de locura, amores que no han sido lo esperado, viajes inolvidables, mas findes de locura con sus respectivos..., más buenos viejas y para ternimar un botellón preámbulo de las fiestas que fue muy interesante y eficiente (valió una peña).
Y mi vida ha cambiado, desconfio porque sí y ya está, y todo por culpa de un ser que...mejor ni mencionar, tanto tanto para luego olvidarte de mí de la noche a la mañana y sin ninguna explicación, así no se usa a la gente, y más sabiendo que no hacian falta engaños, que lo que pasó hubiera pasado de todos modos.
El extranjero me ayudó a asimilar todo y a pasar página y ver las cosas desde otro punto de vista, que hay que preocuparse de la gente que realmente te importa y te quiere, y dejar a un lado lo demás, vivir y apreciar los pequeños detalles del día a día.
Y que decir de mi pueblo? En mi vida había hecho una inmolación tan brutal, en todos los sentidos, y última vez que la hago pero...pero...pero mereció la pena, quitarme toda esa rabía que tenía acumulada y que, aún hoy, me mata a veces, pero al menos ya no es insoportable.
Y llegar aquí fue mi decaida, aunque ya me va gustando más, mis amigos, gente nueva en mi vida y esas fiestas me llenan, necesitaba este verano para madurar un poco y ver que estando soltera también se puede ser feliz.
feeling corporal: bien, gracias.
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